Es muy frecuente que ante una lesión que produzca herida por golpe, traumatismo, por una incisión quirúrgica o una quemadura, lo primero que pensemos sea…
¡Oh cielos! ¿Me quedará cicatriz, marca o señal en la piel?
Salvo en lesiones menores y muy superficiales (hasta un arañazo puede convertirse en una cicatriz rebelde) tengo que decirte que sí, que te va a quedar una cicatriz. Otra cosa es que no se vea. Vamos a ayudarte y enseñarte a cuidarla.
¿Empiezo? Estas son las tres grandes preguntas que recibimos en la farmacia sobre el cuidado de cicatrices. Coinciden además con las que recibo en el blog y en la Tienda de la Cicatriz.
1. ¿Cuándo se me va a curar?
La herida, si no surgen complicaciones, se va a curar rápidamente. Si la herida se infecta, la cicatrización se complica. Por eso, en la primera fase de la cicatrización lo más importante es la limpieza, desinfección y asepsia. Se forma un coágulo a modo de “tapón” casi de forma inmediata y en 3 o 4 días va desapareciendo el exsudado.
El coágulo empieza a secarse y endurecerse dando lugar a una “costra”. Debajo de ella hay gran actividad: se está formando la nueva piel o epitelio que recubrirá la herida. Es importantísimo no tocarla, no pellizcarla, no arrancarla y no rascarse para no desprenderla ya que tiene una función de protección de esa nueva piel que se perdería. Si interrumpes la reparación celular, se puede volver a abrir la herida y las posibilidades de marca o señal aumentan.
¿Es normal sentir picor y tirantez con la herida ya cerrada?
Sí lo es, ya que la costra empieza a retraerse, a deshidratarse, se va haciendo más pequeña hasta que se desprende y este proceso es la causa de esa sensación de tirantez y/o picor.
Mi recomendación es utilizar aceite puro de rosa mosqueta Repavar Advance (encontrarás información en este enlace). La combinación de factores de crecimiento con los ácidos grasos esenciales del aceite de rosa mosqueta, en la misma fórmula, es perfecta para nutrir, flexibilizar, aliviar el picor y tirantez por un lado, y ayudar a que se forme una nueva piel bajo la costra por otro.
Ya no tengo costra y la cicatriz se nota porque está rosada, ¿es normal?, ¿cuándo se pondrá del color de mi piel?
La paciencia es un buen ingrediente de cara a la cicatrización J Somos impacientes por naturaleza y es que… la cicatrización es un proceso lento y largo, con una duración media de 18 meses. Esa nueva piel que se ha formado es muy frágil y está aún muy vascularizada, hay vasodilatación en la zona y las células epiteliales siguen recibiendo la señal de trabajar produciendo tejido conectivo para asegurar la reparación.
De ahí el color rosado o rojizo de las cicatrices recientes. Significa que la cicatriz está activa, lo cual es fantástico porque puedes actuar sobre ella cuidándola bien. Y tu cicatriz puede permanecer activa (y roja o rosada) durante meses, ¡de ahí la paciencia!
Es importantísimo protegerla siempre del sol y esto significa aplicar fotoprotector solar y, además, evitar la exposición solar siempre que sea posible. Con el sol y las cicatrices toda precaución es poca.
Dependiendo de tu tipo de piel, la capacidad de cicatrización y la situación de la herida, la cicatriz puede:
– hiperpigmentarse, la zona tan vascularizada permite a la melanina migrar más rápidamente hacia la superficie para proteger la nueva piel de la radiación solar, originando un color más oscuro que el resto de la piel que la rodea;
– hipopigmentarse, el tejido cicatricial se forma para reparar y tapar la lesión, no tiene per se capacidad de producir melanina. Muchas cicatrices adquieren un característico color blanco que queda resaltado (por contraste) si te expones al sol sin protección.
2. ¿De qué tipo es?
Al principio todas las cicatrices son muy parecidas, y según van evolucionando van adquiriendo características que permiten identificarlas como:
– Cicatrices planas: son las de mejor pronóstico y las que menos se notan salvo que estén hipopigmentadas.
– Cicatrices hipertróficas: son cicatrices abultadas, con relieve. Con frecuencia el tejido cicatricial se extiende superando los bordes de la herida original. Se producen cuando el organismo no deja de enviar la señal de “repara, repara” a las células epiteliales y hay un exceso de colágeno y tejido conectivo que se va superponiendo en capas dándole grosor a la cicatriz. Sería una “sobrecicatrización”.
– Queloide: es un tipo de cicatriz hipertrófica, con mucho relieve, abultada, gruesa, densa, con frecuencia en forma de cordón, con los límites bien delimitados.
– Cicatrices atróficas: son cicatrices, marcas o señales hundidas, como las que produce el acné o la varicela. También las causadas por el roce con una superficie dura, o un arañazo, en que se produce una pequeña pérdida de tejido. Las cicatrices atróficas conllevan pérdida o destrucción de tejido y con frecuencia se hiperpigmentan. Protegerlas del sol es fundamental.
– Cicatrices con adherencias: son aquellas en que las que el tejido cicatricial se adhiere a la superficie que tiene debajo. Se forman entre dos superficies haciendo que estas se peguen. Existe mayor riesgo de que se formen en cirugías abdominales (apendicitis, cesáreas…), cirugías internas o en articulaciones. Pueden aumentar de tamaño y volverse rígidas con el tiempo y pueden limitar el movimiento e incluso producir dolor. La rehabilitación con masajes es la mejor solución para eliminarlas y movilizar el tejido cuando la cicatriz es reciente. Desde hace unos años, la carboxiterapia está dando muy buenos resultados incluso para “despegar” cicatrices antiguas.
3. ¿Cuál es el mejor tratamiento para la mía?
Llegando ya al final del artículo, la pregunta del millón. Casi puedes contestarla tú.
El mejor tratamiento para tu cicatriz es:
1. Protegerla siempre del sol.
2. Limpieza y desinfección hasta que se cierre la herida.
3. Como primer cuidado tras la desinfección y a partir de la semana 2: aceite puro de rosa mosqueta Repavar Advance, siempre acertarás con su uso al inicio de la cicatrización (de 3 a 6 meses mínimo).
4. Masajearla suavemente al aplicar el producto de cuidado si la cicatriz es pequeña, o realizar rehabilitación profesional si es más importante. Los masajes, además de prevenir adherencias y ayudar a eliminarlas, ayudan a aplanar el relieve de la cicatriz, ejercen presión y la presión controlada mejora la cicatrización, evita la retracción del tejido cicatricial y mejora la circulación de la zona por vasodilatación.
5. A partir del primer mes, además de los cuidados anteriores, recomiendo un Gel de silicona para evitar la proliferación de tejido y el relieve de la cicatriz, especialmente si no cicatrizas bien o quieres prevenir cicatrices hipertróficas. El gel se puede combinar con aceite de rosa mosqueta aplicándolo a continuación del mismo, cuando se haya absorbido.
Las cicatrices son como las arrugas, cuentan nuestra historia, son compañeras de viaje que nos recuerdan quiénes somos y todo lo que nos ha pasado.
Cuida mucho y bien tus cicatrices. Paciencia, constancia y disciplina. Sin ellas, no existe ni existirá una buena cicatrización.