La vitamina C es uno de los activos naturales más potentes y eficaces para recuperar la luminosidad de la piel.
Sus propiedades intrínsecas, unidas a la tecnología estética más innovadora, la convierten en un aliado perfecto para prevenir y luchar contra los signos del envejecimiento, ya que proporciona a nuestra piel una gran cantidad de antioxidantes naturales.
El cansancio, el estrés diario, los efectos del sol y la contaminación hacen que nuestra piel vaya perdiendo luminosidad y se vea más cansada y apagada con el paso del tiempo.
Según los últimos estudios dermatológicos, la Vitamina C nos ayuda a recuperar la luminosidad del rostro gracias a que combate los radicales libres que generan los agentes externos como el sol o la contaminación ambiental. Además, unifica el tono de nuestra piel lo que le proporciona un aspecto más cuidado y saludable.
La vitamina C produce en nuestro rostro cuatro acciones fundamentales para reforzar la luminosidad de nuestra piel:
1. Acción Antioxidante: La vitamina C es el antioxidante por naturaleza. Nuestra piel es incapaz de neutralizar los efectos de los radicales libres por si sola y la vitamina C se convierte en su mejor aliado.
2. Acción Regeneradora: Aplicada de forma tópica la Vitamina C nos permite dotar de más elasticidad a nuestra piel, lo que se traduce en una piel más tersa y con mucho mejor aspecto.
3.Acción Hidratante: Además de aportar a nuestra piel la siempre necesaria hidratación extra, la vitamina C ayuda a retener la humedad orgánica de nuestra piel evitando sequedad, tirantez e irritaciones.
4.Acción Iluminadora: La combinación de estas tres acciones tiene como resultado una iluminación inmediata de tu piel. La piel recupera su tono natural y pierde el color apagado y cetrino.
Cómo aplicar la Vitamina C
Pero, para que la efectividad de la vitamina C sea máxima es importante elegir un buen tratamiento y establecer cierta rutina en su aplicación. Por eso si queréis recuperar la luminosidad de vuestra piel rápidamente y además conseguir un efecto lifting inmediato os recomendamos este breve, pero eficaz ritual:
1. Limpiar el rostro. Para conseguir que la vitamina C penetre mejor en nuestra piel y de este modo sus principios activos sean más eficaces profundizando en la epidermis, es importante preparar nuestra piel con una limpieza previa que la libere de la suciedad y de las células muertas. El Agua Micelar de la gama Repavar Revitalizante además de limpiar la piel la tonifica para mantenerla saludable y joven.
2. Aplicar una ampolla flash de vitamina C de la gama Repavar Revitalizante: Una vez que nuestra piel esté limpia, solo tenemos que aplicar sobre ella una ampolla flash de vitamina C y conseguiremos ¡un efecto lifting inmediato! Nuestra piel estará más tersa, luminosa y con mucho mejor aspecto en cuestión de minutos.
Una dieta sana, en la que estén incluidos aportes importantes de Vitamina C, un buen tratamiento como las ampollas flash de Repavar y un poco de constancia serán nuestros aliados perfectos para lograr recuperar y mantener la luminosidad de nuestra piel y tener un rostro impecable para disfrutar del verano.