Nuestra piel cambia continuamente, pero es entre los 25 y los 30 años cuando en ella empiezan a hacer aparición los primeros signos del envejecimiento.
Los signos del envejecimiento
Como nosotros, nuestra piel envejece de forma inevitable. Las células cutáneas pierden funcionalidad: su metabolismo se ralentiza, se debilita su barrera protectora y disminuye la producción de colágeno, lo que tiene efectos visibles y fáciles de identificar
Arrugas
Uno de los primeros signos de envejecimiento es la aparición de líneas finas y arrugas debido al adelgazamiento de la capa exterior de la piel. Suelen surgir en distintas zonas del rostro como los ángulos externos de los ojos (patas de gallo), alrededor de la boca, las mejillas, la frente y entre las cejas, y aumentar tanto en cantidad como en profundidad a medida que pasan los años.
Pérdida de elasticidad y firmeza
Al producirse menos elastina y colágeno, el tejido del rostro, del cuello y del pecho pierde firmeza, alterando el ovalo facial.
Sequedad y aspereza
La disminución en la producción de las glándulas sebáceas y sudoríparas debido a la edad reduce sustancialmente los lípidos que llegan al manto de la piel, lo que da como resultado sequedad cutánea, aspereza y sensibilidad a ciertas superficies
El proceso de envejecimiento fisiológico es inevitable, pero sí
podemos luchar contra los factores externos que lo aceleran
ralentizando su aparición y sus signos visibles
Causas del envejecimiento prematuro
Nadie puede evitar hacerse mayor, pero conocer los factores que aceleran el proceso de envejecimiento de la piel o propician su aparición prematura nos permite adoptar hábitos y tratamientos capaces de permitirnos disfrutar durante el mayor tiempo posible de una piel sana, tersa y joven.
Fotoenvejecimiento: envejecimiento de la piel por el sol
Los factores ambientales son los principales causantes del envejecimiento de la piel. Y por encima de todos destaca la exposición solar. Y es que una exposición prolongada a la radiación ultravioleta puede llegar a tener más efectos negativos en nuestra piel que el propio paso del tiempo, manifestándose en arrugas, cambios en la pigmentación, manchas, rojeces y sequedad. Te recomendamos prevenir su aparición aplicando diariamente productos con protección solar incorporada y Vitamina C antioxidante, como la Crema de Día de Repavar Revitalizante.
Otros factores ambientales a evitar
Además de la radiación solar, existen otros factores que pueden acelerar nuestro envejecimiento:
- La polución: algunas sustancias presentes en el aire pueden envejecer nuestra piel de forma prematura.
- El estrés: el cabello y la piel son los primeros en manifestar los efectos de las emociones negativas
- Una mala alimentación: una dieta sana y equilibrada mantiene joven nuestra piel.
- El alcohol y el tabaco: beber y fumar deshidrata los tejidos cutáneos y afecta a su fuerza y elasticidad.
- La falta de sueño: las células cutáneas también necesitan sus horas de descanso para recuperarse